Esta metodología es una solución a los desafíos que se presentan en el desarrollo de software, como la escasez de talentos, la velocidad de desarrollo y la complejidad de los proyectos. Con el low-code, los desarrolladores pueden crear aplicaciones más rápidamente y con menos errores.

Las plataformas de low-code son fáciles de usar y están diseñadas para ser intuitivas para los desarrolladores y usuarios finales. Estas plataformas ofrecen una amplia gama de herramientas, desde componentes de interfaz de usuario hasta conectores de datos, que permiten a los desarrolladores crear aplicaciones complejas sin necesidad de escribir mucho código.

Con el low-code, las empresas pueden reducir significativamente los costos de desarrollo y mejorar la eficiencia. Además, pueden adaptarse rápidamente a las cambiantes necesidades del negocio y ofrecer soluciones innovadoras a sus clientes.

En resumen, el low-code es una metodología de desarrollo de software que ofrece una forma más rápida, eficiente y rentable de crear aplicaciones. Las plataformas de low-code son fáciles de usar y permiten a los desarrolladores crear aplicaciones complejas sin necesidad de escribir mucho código.